martes, 21 de mayo de 2013

Un motivo para querer reformar la Educación en España.

Recuerdo un monólogo del Club de la Comedia que comenzaba diciendo que "si hay algo que nos caracteriza a todos los españoles por igual, independientemente de la esquinita del país que escojamos para realizar el muestreo, es el popularmente conocido como inglés nivel medio". Supongo que todos sabrán a qué me refiero con este nivel de inglés: un eufemismo que ya no engaña a nadie, reflejo de las carencias de nuestro sistema educativo -tantas veces deconstruido y reconstruido en los últimos años- que recientemente ha visto nacer la llamada Ley Wert.

Dejando al margen la realidad multilingüística de este país en sus vertientes autonómicas, lo cierto es que no hago ningún descubrimiento si afirmo que la enseñanza y el aprendizaje de las lenguas extranjeras durante los diez años que comprende la educación obligatoria es muy deficiente. Sin paños calientes. Sin paliativos. Quien diga que "deja mucho que desear", "no es todo lo buena que debiera ser", o "es susceptible de amplias mejoras" miente. 

Miente como un bellaco y además no engaña a nadie. Miente porque durante diez años, probablemente los diez mejores años para el aprendizaje de un idioma nuevo, nuestros jóvenes reciben dos o tres clases semanales de inglés en las escuelas e institutos de todo el país. Diez años al término de los cuales la inmensa mayoría de nuestros jóvenes no poseerá el nivel mínimo necesario para afrontar con éxito un examen oficial de inglés que les permita acreditar si quiera un nivel B1. Nivel éste que apenas es el mínimo imprescindible para optar a cualquier oferta de empleo en el extranjero. ¿Acaso no se supone que la educación obligatoria ha de capacitar por sí misma a los adolescentes a acceder plenamente al mundo laboral?

En algunas Comunidades Autónomas los colegios e institutos bilingües han florecido por doquier, y no sólo aquellos que ofertan un currículum bilingüe en castellano e inglés, también los hay (aunque sean menos abundantes) francés-español y alemán-español. Pero, ¿en qué consiste la educación bilingüe? ¿Es esta la solución? Contrariamente a lo que se pueda pensar, en los centros bilingues tan sólo se imparten dos o a lo sumo tres asignaturas del currículum en lengua extranjera por curso académico, y una de ellas casi siempre es la Educación Física. Ojo, que yo no tengo nada contra la Educación Física, pero ya me dirán ustedes cuánto inglés se puede aprender en un año de Physical Education. Así que más que solución es un parche, y además generando otros problemas, porque si el nivel general de inglés (y donde digo inglés sirva cualquier lengua extranjera que sea objeto de un programa bilingüe) es escaso o tirando a bajo, imaginen el nivel de comprensión que los alumnos tendrán de la Historia o la Biología explicada en ese idioma.

Más aún, para ser profesor de Biología o Historia en un instituto bilingüe y poder impartir tu asignatura en lengua extranjera, tan sólo te piden estar en posesión de un certificado de nivel B2 para esa lengua. Pues bien, muy a pesar de saber que estoy tirando piedras contra mi propio tejado, considero treméndamente insuficiente un B2 para impartir una asignatura completamente en lengua extranjera.

No quiero extenderme demasiado pero creo necesario hacer al menos un apunte de lo que ocurre cuando hablamos del aprendizaje de una segunda lengua extranjera. Algo que resulta de vital importancia en un escenario futuro de integración europea, y que llevan a cabo con muchísima más seriedad gran parte de nuestros vecinos europeos. No, aquí no. Aquí la segunda lengua extranjera se plantea como una optativa maría, que aprueba todo el mundo y en la que los contenidos no van a variar en absoluto de un año a otro, independientemente de si estás en primero de la ESO o en segundo de bachillerato. Un, deux, trois. Je suis, tu es, il est.

Menos mal que nuestro flamante Ministro de Educación ha preparado una nueva ley educativa con la intención de subsanar todos estos problemas que nuestros adolescentes tienen en el aprendizaje de las lenguas extranjeras. Conocedor (como seguro que lo es) de dónde residen los problemas que impiden que nuestros chavales salgan de los institutos con un alto nivel de inglés y manejándose moderadamente bien en francés o alemán, ha decidido lo que todos sabéis: poner crucifijos en todas las aulas para  que Dios ilumine a nuestros alumnos y les dé el don de la xenoglosia. Ole sus huevos.
Los huevos de Wert.


PD: Inicié este post pretendiendo hablar del "furor germano" que nos ha infectado un poco a todos últimamente y por el cual, de repente, nos ha dado por estudiar alemán a toda prisa y casi a cualquier precio.  Pretendía hacer alguna alusión a la conveniencia o no de fomentar el alemán en los institutos como segunda lengua extranjera a costa del francés, o si habría la posibilidad de combinar alemán y francés de algún modo. También quería reflexionar sobre los motivos por los que se está dando este furor germano, y qué realidad se esconde detrás de lo que parece ser ante todo una ilusión. Y sin embargo, entre unas sinápsis y otras, he terminado tecleando algo que no era precisamente lo que tenía previsto. Mis disculpas, otra vez será.



lunes, 7 de mayo de 2012

Cuando Sarkozy era SuperSarkozy.

Autor: European People's Party
Se acabó. Desde anoche, Nicolás Sarkozy ya no es presidente de Francia. Bueno, aún transcurrirá algo más de una semana hasta que sea relevado del cargo el próximo día 17 por el vencedor de los comicios de ayer, François Hollande. Y son muchos, muchísimos, los que se alegran desde España. Algunos, porque simpatizan con Hollande. La mayoría, sin embargo, se alegra sólo porque de un tiempo a esta parte ha aborrecido a Sarkozy. Ésta es la condición humana.

Sin embargo, es justo reconocerle algunos méritos al presidente saliente, y es que hubo un tiempo en el que fue SuperSarkozy. De hecho, empezó a serlo nada más tomó posesión de su cargo como Presidente de la República Francesa en Mayo de 2.007. Su primera acción heroica fue el rescate de las cinco enfermeras búlgaras y el médico palestino que habían sido condenados a muerte por un tribunal libio acusados de contagiar el sida a propósito a más de 400 niños en un hospital de Benghasi. Fue una primera medalla que colgar sobre su pecho, pero un pelín descolorida por el alto precio pagado.

En noviembre, apenas medio año después, y para sorpresa de todos, el Président Sarkozy se subía al Air Force One francés para ir a Yamena a interceder ante el Gobierno de Chad por los ciudadanos franceses y españoles que habían sido detenidos en una operación contra el tráfico de niños. Esa misma noche, aterrizaba en Madrid con las cuatro azafatas españolas que habían sido injustamente detenidas, para poco después continuar su viaje hasta París con los tres periodistas franceses liberados. Aquella noche dejó en evidencia a toda la diplomacia española, con Zapatero y el Rey Juan Carlos I a la cabeza.

Nueve meses más tarde, coincidiendo con el pistoletazo de salida de los Juegos Olímpicos de Beijing '08, el ejército ruso, cumpliendo ordenes del Tzar Putin I de todas las Rusias entraba en Georgia como un elefante en una cacharrería. Las reacciones de los líderes europeos fueron muy tímidas, y el aparato burocrático de la UE tardó en ponerse de acuerdo sobre la postura oficial a tomar. Entonces apareció él. Sin que nadie se lo esperara, SuperSarkozy, muy convencido del papel que estaba representando como presidente rotatorio de la UE, volvió a coger el avión presidencial francés para trasladarse a Moscú, donde cerró el acuerdo de paz que puso fin a aquel conflicto. Ningún presidente rotatorio, ni Van Rompuy  o Durão Barroso como máximos representantes de la UE han mostrado jamás el liderazgo que mostró SuperSarkozy, mientras fue SuperSarkozy.

Luego vendría el Sarkozy que todos tenemos en mente ahora que abandona el Elíseo por la puerta de atrás. El que deportó a los gitanos de nacionalidad rumana en 2010, como si no fueran ciudadanos europeos (o personas). El Sarkozy que cerró su frontera con Italia cuando estalló la Primavera Árabe, para protegerse egoístamente de la avalancha de refugiados tunecinos. El Sarkozy que forma la mitad de Merkozy. El Sarkozy que tantos ataques ha lanzado últimamente contra Schengen. Pero sobretodo, nos viene a la mente el Sarkozy que para ganar votos contra Hollande ha pisado mil y una vez el nombre de España.

Tal vez por eso sea conveniente recordar que este hombre bajito, feucho y narizón que tan mal nos cae hoy fue un día, no hace tanto, SuperSarkozy. Y a mí entonces me caía bien.

Bonus Track: OK, durante la guerra de Osetia del Sur el presidente ruso era Dmitri Medvédev. Pero, ¿acaso Putin ha dejado de ser el Tzar de todas las Rusias alguna vez desde que se hizo con el trono en mayo del 2.000? Pues eso.

Bonus Track 2: No he comentado nada de su papel en la liberación de Ingrid Betancourt porque aunque trabajó muy duro para conseguirla, al final fue una operación militar dirigida por el ejército colombiano quien la liberó.




sábado, 28 de abril de 2012

¿Suspensión temporal de Schengen o pantomima?

Hoy 28 de abril es un día gris en España. Algunos pensaréis que la culpa la tiene aquella ciclogénesis explosiva que entró a mitad de semana por Galicia y que todavía está con nosotros. Sí y no. Bien es cierto que Petra (que así se llama la bendita borrasca), nos ha robado a todos por unos días nuestra ansiada primavera, pero de lo que yo quería hablar ahora es de la cuasi desapercibida suspensión temporal de Schengen que entró en vigor a media noche de hoy.

Antiguo puesto fronterizo en Portalet d'Aneu
Como bien sabéis los que me seguís, para mí Schengen es un pilar fundamental de la UE, sin el cual Europa no es nada. Ahora bien, ¿qué es exactamente lo que está pasando en nuestras fronteras? Bajo mi punto de vista, resulta demasiado pretencioso hablar de la suspensión (temporal o no) de Schengen cuando la medida sólo afecta a la frontera entre España y Francia, manteniéndose la libertad de circulación entre España y Portugal que garantiza el tratado europeo; si bien es cierto que cerrar la frontera francesa significaría en la práctica cerrar la frontera con la mayor parte de Europa.

Y en la frontera francesa, ¿qué está ocurriendo? Pues por lo visto, lo único que vamos a encontrar si queremos entrar a España a través de Francia son controles policiales establecidos por la guardia civil y la policía nacional en las carreteras, a todo lo largo de frontera. Además, se están haciendo controles en las estaciones de tren que comunican Cataluña con el otro lado de los Pirineos. Estos controles (según la versión oficial) están pensados para prevenir y disuadir la entrada en España de "radicales antisistema" que pudieran venir a Barcelona para protestar y, de paso, cometer actos vandálicos con motivo de la cumbre del Banco Central Europeo que se celebra en la Ciudad Condal el próximo 3 de Mayo.

En la memoria de todos están los altercados que se produjeron durante la huelga general del pasado 29 de marzo. Según he oído este medio día en el telediario, estos radicales antisistema cuya llegada se pretende evitar, serían en su mayor parte ciudadanos griegos e italianos. Y yo me pregunto, los vándalos que atentaron contra el mobiliario urbano en Barcelona el 29 de marzo, ¿de dónde eran? ¿Griegos? ¿Italianos? ¿O eran todos españoles? Y, siendo como eran españoles todos, ¿por qué se señala directamente a nuestros vecinos italianos y griegos como sospechosos de ser vándalos y delincuentes? Por otro lado, si queremos blindar Barcelona para la susodicha cumbre, ¿por qué no cerramos también las fronteras de Cataluña con Aragón y la Comunidad Valenciana? O mejor aún, ¿no sería más eficaz cerrar los accesos a la provincia de Barcelona desde las limítrofes Tarragona, Lleida y Girona? ¿Por qué hacer controles aleatorios en la frontera francesa y decir que se está suspendiendo Schengen, cuando en realidad todo es un paripé montado para parecer que se hace algo cuando en realidad no se está haciendo nada?

Porque la realidad es que no se está haciendo nada. Y es que a ningún ciudadano europeo se le está impidiendo entrar en España por la frontera francesa, a menos que se trate de un delincuente en busca y captura o que esté fichado por la policía. En los controles, la guardia civil está requisando "material peligroso" como navajas o bates de béisbol. Claro, todos sabemos que en Barcelona es casi imposible comprar una navaja. (sic)

Mi opinión es que todo esto es una maniobra más para eliminar derechos y libertades de los ciudadanos, y una puñalada más contra  Schengen. Porque, si bien esta medida no es realmente una suspensión del tratado que garantiza la libre circulación de ciudadanos entre los países firmantes (que ni son todos los miembros de la UE, ni pertenecen todos a la UE), sienta las bases para que finalmente se aprueben las restricciones a Schengen que Francia y Alemania vienen reclamando desde hace algunas semanas.

Falta por saber si todo este circo (que no suspensión) que estamos viviendo y vamos a vivir durante esta semana ha sido idea de nuestro Gobierno para curarse en salud y evitar que pueda nadie culparlo por no haber hecho nada para prevenir los altercados que muy presumiblemente van a tener lugar, o si ha venido impuesto, como tantas otras cosas, por el eje París-Berlín.

Huelga decir que, en cualquier caso, si yo fuera ahora mismo el Presidente de Europa, no hubiera consentido bajo ningún concepto que se menoscabara el nombre de Schengen para montar este paripé. Porque sin Schengen, repito una vez más, Europa no es nada.

viernes, 13 de abril de 2012

Las Políticas Europeas de Vecindad II: Marruecos

Como ya comenté hace un par de semanas, las Políticas Europeas de Vecindad, no se pueden ni deben aplicar indiscriminadamente a todos los vecinos de la UE, a pesar de las ventajas que en materia de seguridad y estabilidad pudiera conferir a la Unión.

Si en el caso de Bielorrusia, las razones esgrimidas por Bruselas para marginarles diplomáticamente son el régimen dictatorial de Lukashenko y las continuas violaciones de los derechos humanos, estos mismos argumentos podrían emplearse, sin necesidad de maquillaje alguno, para vetar cualquier relación de amistad con Guinea Ecuatorial, Corea del Norte, o Marruecos.

De estos tres Jardines del Edén, quizás Corea del Norte sea el único que goza del estatus que merece, es decir, marginado, señalado y demonizado; pues con Guinea Ecuatorial, al tener unos bonitos yacimientos petrolíferos, mantenemos una relación más que cordial. No obstante, es Marruecos el que goza de unas relaciones más fuertes, amistosas y afianzadas con la UE, y el único de los tres que, por su situación geográfica, goza de los beneficios de las Políticas Europeas de Vecindad.

Y yo me pregunto, ¿a quién benefician todos los acuerdos firmados entre la UE y Marruecos? ¿A los ciudadanos marroquíes? ¿A los europeos? Yo no lo veo claro, pero diría que ni a unos ni a otros. Pero desde luego, a quién no beneficia nada es a los agricultores españoles. A mí, particularmente  me da muchísima rabia cada vez que voy al supermercado a comprar judías verdes para hacer un arroz con verduras (que me sale riquísimo, por cierto), y sin importar a qué supermercado vaya, sólo encuentro bajocas marroquíes. ¡Y vivo en Murcia! Murcia, "la huerta de España". Pues parece que, o bien no tenemos judías en la huerta del Segura, o sale más barato traerlas de Marruecos.

Es un sin sentido absoluto. Para empezar, los agricultores europeos están sometidos a una serie de leyes que regulan desde la afiliación a la Seguridad Social (más de 200 euros al mes ha de pagar un agricultor autónomo en España), el salario mínimo que deben pagar a los jornaleros que contraten, y hasta el tipo y cantidad de productos fitosanitarios que pueden emplear en sus cultivos. Y, sin embargo, los agricultores marroquíes no están sujetos a ninguna regulación por parte de la UE, pudiendo pagar jornales más bajos, sin necesidad de estar pagando ninguna seguridad social, y siendo libres para emplear los plaguicidas más baratos del mercado, aunque la UE los haya prohibido por su toxicidad para el hombre, las abejas, los peces o en general, el medio ambiente.

Por otro lado, están los acuerdos pesqueros, en virtud de los cuales Marruecos siempre ha hecho negocio con las aguas territoriales saharauis, ¡cómo si el Sáhara Occidental fuese una provincia más de Marruecos! Lo triste es que el Sáhara Occidental sí es, de facto, una provincia  más dentro del Reino Alauita. O, más exactamente, dos regiones (El Aaiún-Bojador-Saguia el Hamra y Río de Oro-La Güera) y media (Guelmim-Esmara, cuya mitad sur pertenece al territorio saharaui). Otra cosa es que yo esté de acuerdo con que sea así, pero la Cuestión Saharaui es motivo de un post completo (por lo menos) y éste ya me está quedando demasiado largo (como casi siempre). En cualquier caso, los acuerdos pesqueros no han sido renovados, precisamente porque por fin la UE ha considerado que en este caso particular, Marruecos hace negocio ilegalmente con las aguas saharauis. Sólo falta por ver hasta cuando durará el bloqueo del Parlamento Europeo y si no se volverán a firmar nuevos acuerdos pesqueros con Marruecos antes de que acabe el año.

Por último, me gustaría señalar que a pesar de todos los privilegios que la UE ha otorgado a Marruecos, este no es ni mucho menos el mejor de los amigos que podemos tener ahí afuera. Porque sigue reclamando la devolución de Ceuta y Melilla (has leído bien, "devolución", como si alguna vez hubieran sido marroquíes); y porque, puestos a pedir, también reclama las islas Canarias como propias. Y yo me pregunto, ¿de qué nos sirve que el rey de España sea íntimo amigo de Mohamed VI?
Juan Carlos I conversando con un jovencísimo Mohamed VI en 1975.

Por todos esto, cuando yo sea El Presidente de Europa, romperé en mil trocitos todos los acuerdos firmados con Marruecos, poniendo como condiciones para retomar las relaciones de amistad el fin de la ocupación del Sáhara Occidental, así como de sus pretensiones imperialistas sobre el archipiélago Canario y las ciudades españolas de Ceuta y Melilla. Me cuesta creer que Mohamed VI pudiera acceder alguna vez a estas peticiones; pero si lo hiciera, jamás firmaría con él ningún acuerdo económico que perjudicara los intereses económicos de los agricultores europeos.

Bonus Track: Al hablar de las judías para ilustrar cómo los productos agrícolas marroquíes invaden el mercado español, y asfixian la economía de los pequeños productores europeos me he acordado de una anécdota sobre Catón el Viejo. Este censor se hizo conocido por terminar todos sus discursos, fuesen del tema que fuesen, con la locución "Ceterum censeo Carthaginem esse delendam"que se traduce como "además opino que Carthago debe ser destruida". Según cuentan, en una de sus intervenciones más famosas ante el Senado dejó caer deliberadamente del bolsillo un par de higos. Tras dejar que los senadores alabaran su tamaño y calidad, señaló que procedían de Carthago, acusando a ésta de competencia desleal y de estar colapsando la economía romana. Sin embargo, se trataba de higos cultivados en su propio huerto y, en el fondo, la mayoría de los senadores lo sabía. Aún así, se salió con la suya, aunque no vivió para verlo. Bueno, pues quisiera aclarar que yo no quiero parecerme a Catón el Viejo: ni he editado la etiqueta de las judías con el photoshop, ni deseo la destrucción de Marruecos. Toda hostilidad que pueda verse reflejada en este blog va contra regímenes políticos concretos, y nunca contra sus ciudadanos.



sábado, 31 de marzo de 2012

Ucrania y sus aspiraciones europeas.

Hoy es un día señalado en la agenda del presidente ucraniano Víktor Yanukóvych, pues si todo sale como está previsto, al final del día su ministro de exteriores Kostyantyn Hryshchenko habrá firmado un acuerdo de estabilización y asociación con la Unión Europea. Sin embargo, el acuerdo no será ratificado por las instituciones europeas hasta finales de año, si y sólo si Ucrania cumple una serie de condiciones.

Entre estas condiciones está la puesta en libertad de la que fuera Primera Ministra ucraniana hasta Marzo de 2.010, Yulia Tymoshenko, en prisión desde agosto de 2.011 por un supuesto delito de abuso de poder y "traición a la Patria". Estos delitos se habrían producido durante la firma de los acuerdos que pusieron fin a la Crisis del Gas con Rusia en enero de 2.009. Ciertamente, la vida, obra y milagros de la "Princesa del gas" dan para escribir una trilogía como la de El Señor de los Anillos, y no es mi intención extenderme demasiado con los detalles.

Yulia Tymoshenko
Por diversas circunstancias, Bruselas tiene serias dudas de que el arresto y procesamiento de Tymoshenko se ajusten a la legalidad  internacional; más aún cuando el abogado de la ex-Primera Ministra ha puesto en boca del propio Yanukóvych que "el juicio a Tymoshenko tiene poco que ver con la Justicia entendida según los estándares europeos". De ahí que Bruselas sospeche que la motivación subyacente para encarcelarla sea la de inhabilitarla para las elecciones presidenciales que se celebrarán en otoño de este año. Sin embargo, y conociendo los antecedentes de Tymoshenko, yo no me atrevería a cuestionar las acusaciones de abuso de poder y traición a la Patria, aunque habría que reconocerle ciertos atenuantes dada la presión que sufrió en aquellos días por parte de diversos países de la UE para que pusiera fin como fuera a aquella crisis.

Pero, ante todo, lo que deberíamos cuestionarnos es si un país con semejante cuadro está preparado para dar ningún paso hacia Europa. Sin ir más lejos, hoy mismo hemos conocido los detalles de un escalofriante caso de violencia, donde estaban implicados hijos de una ex-alcaldesa y un ex-fiscal de la ciudad de Mykolaiv. Lo más espeluznante del caso, a parte de la crueldad intrínseca del crimen cometido, es que estos "hijos de" fueron rápidamente puestos en libertad, demostrando el servilismo y la poca independencia que caracteriza a la justicia ucraniana. Afortunadamente, esta vez, la presión de la sociedad ucraniana parece que va a conseguir que estos desalmados paguen por sus delitos.

Hablantes nativos de ruso en Ucrania.
Por último, quedaría por tratar todo lo referente a la presencia rusa en Ucrania. Por un lado, resulta evidente que Ucrania no respeta los derechos de la importante minoría rusa que vive en el país (aproximadamente, un 17%), al haber impuesto el idioma ucraniano como única lengua oficial del estado, desterrando al ruso de todos los ámbitos de la vida pública. Como contrapartida, Rusia posee en Sevastopol la base principal de su flota en el mar Negro, y ejerce una importante presión en el gobierno ucraniano. De hecho, no me cabe la menor duda de que si Ucrania no se ha unido todavía a la OTAN ha sido porque Rusia no le ha dado permiso.

Se ha llegado incluso a plantear que en el hipotético caso de que Ucrania acabara uniéndose a la UE en un futuro próximo, probablemente sería previa partición del país en dos, siendo el río Dniéper el que marcaría la nueva frontera. Y es que la afinidad política de la mitad oriental es claramente pro-rusa, mientras que la mitad occidental es mucho más europeísta, existiendo además claras diferencias en cuanto al desarrollo económico y poder adquisitivo entre estas mitades, siendo la parte pro-rusa mucho más rica que la parte occidental del país. En cuanto a Crimea, posiblemente cayera del lado ruso, o incluso podría formar un estado nuevo independiente.

Y, ¿si desaparecieran tanto la corrupción política y judicial, amén de las injerencias rusas? ¿Sería Ucrania un buen candidato para la ampliación de la UE? Bueno, creo que la corrupción política y judicial podría desaparecer y seguir siendo Ucrania, pero a día de hoy me resulta muy difícil concebir una Ucrania libre de toda injerencia rusa, incluso en el supuesto de la partición, por lo que sería muy poco realista pretender que Ucrania pueda integrarse satisfactoriamente en la UE a corto o medio plazo.

Bonus track: Últimamente se ha puesto de moda emplear el término "ucranio" en vez de "ucraniano". Como habréis deducido, a mí este nuevo palabro no me gusta, y no lo uso. Ahora bien, me intriga saber el porqué de esta tendencia.




lunes, 26 de marzo de 2012

Las Políticas Europeas de Vecindad I: Bielorrusia


Si algo ha caracterizado desde siempre a la Unión Europea ha sido el esfuerzo que ha realizado desde su nacimiento por mantener siempre la mejor de las relaciones posible con sus vecinos. Fruto de estos esfuerzos han sido por una lado la Ampliación Europea, y por otro la Política Europea de Vecindad. Sin embargo, del mismo modo que la Ampliación no puede ni debe mantenerse hasta el infinito, las Políticas Europeas de Vecindad también han de restringirse en ciertos casos.

Aleksandr Lukashenko
Un ejemplo de lo que hablo es Bielorrusia, un estado europeo que comparte fronteras con Polonia, Lituania y Letonia, pero con quien la UE apenas mantiene relaciones diplomáticas. A esta situación se ha llegado según la versión oficial europea porque el régimen de Aleksandr Lukashenko, en el poder desde 1994, "dista mucho de ser democrático". Las relaciones se enfriaron inmediatamente, en 1995, cuando Bielorrusia se quedó fuera de las Políticas Europeas de Vecindad; y aunque la presidencia polaca de la UE tratara de reconducir la situación a través de la creación del Eastern Partnership en el año 2008, lo cierto es que apenas si ha cambiado algo.

No es el objetivo de este post el cuestionar si hay o no una dictadura en Bielorrusia (que la hay), sino el cuestionar si las razones de la UE para romper las relaciones diplomáticas con Bielorrusia son las que dicen ser. Porque si tanto le cuesta a la UE llevarse bien con un régimen antidemocrático y déspota como el de Lukashenko, ¿cómo se explica lo bien que se ha llevado hasta el estallido de las revueltas árabes de 2011 con las dictaduras norteafricanas de Ben Ali, Gadafi y Hosni Mubarak? Igualmente, ¿cómo se explica el Estatus Avanzado del que disfruta Marruecos?

Mi propuesta como Presidente de Europa no será la de cambiar el statu quo con Bielorrusia, sino el de poner fin a los eufemismos y llamar a cada cosa por su nombre. Con Bielorrusia no hay buenas relaciones porque se trata de un régimen comunista situado a las puertas de Europa y que además es prorruso (unas veces más que otras), y deliberadamente antiestadounidense . Para más inri, ni siquiera tiene ni petróleo, o la soberanía necesaria sobre las conducciones de gas que lo atraviesan para traer el gas ruso a Europa como para resultar un socio interesante. Por todo esto, la UE le ha dado la espalda a Bielorrusia. Que tenga una dictadura o no, es sólo la excusa.


Bonus track: El pueblo bielorruso no se merece el castigo que tiene con Lukashenko, y debería de ser una prioridad de la UE derrocar ese régimen y liberar las cárceles llenas de disidentes bielorrusos cuyo único delito es pensar. La cuestión es cómo hacer eso sin provocar un conflicto grave con Rusia. Y por supuesto, cómo hacerlo sin recurrir a una intervención militar.

miércoles, 7 de marzo de 2012

¿Qué hacemos con Chipre?


Desde que en 1983 se produjera la declaración de independencia de la República Turca del Norte de Chipre (RTNC) con la indispensable colaboración de Turquía, Chipre se encuentra dividido de facto en dos estados distintos, a pesar de que en todo el mundo, sólo Turquía reconoce a la RTNC como un estado independiente. Y es esta falta de reconocimiento internacional una de las causas principales del desconocimiento general por parte de la mayoría de la población europea de la realidad socio-política chipriota.

Distribución etnográfica de Chipre en 1960
Todo comenzó mucho antes. Para no extenderme demasiado con los antecedentes, resumiré un poquito la historia empezando por la invasión y conquista otomana de la isla entre 1570 y 1571. Este acontecimiento marcó el comienzo de la migración desde Anatolia de miles de musulmanes turcos que, durante los siguientes cuatro siglos convivieron más o menos de forma pacífica, aunque sin apenas mezclarse, con la población autóctona de la isla, que era mayoritariamente de origen griego y fé ortodoxa. En 1878, como consecuencia colateral de la Guerra Ruso-Turca de 1877-1878, Chipre pasa a ser un protectorado británico; y en 1914, con el estallido de la Primera Guerra Mundial es convertido oficialmente en colonia británica. Prácticamente al mismo tiempo, las revueltas populares en el Principado de Creta culminan con la desvinculación de éste del Imperio Otomano y su integración en el estado Griego. Esta sublevación se puede considerar como la antesala de las revueltas panhelenístas en Chipre. Sin embargo, la importante minoría turca de la isla se opuso frontalmente a la posibilidad de acabar siendo una minoría étnica en un estado griego. Finalmente, en 1960 Chipre obtiene su independencia del Reino Unido, tras una serie de reuniones en las que participaron delegados británicos, turcos y griegos. Como resultado de éstas, se escribe una complicadísima Constitución para el recién nacido estado chipriota que protegiera a la minoría turca de la isla, y que impide formalmente la integración de la isla en Grecia. Así mismo, el Reino Unido conservaría dos bases militares en el territorio chipriota: Acrotiri y Dhekelia.

A lo largo de la siguiente década, las tensiones interétnicas fueron en aumento, culminando en 1974 con un golpe de estado grecochipriota. Este golpe de estado fue orquestado y apoyado desde Grecia, que en aquel momento se encontraba bajo la "Dictadura de los Coroneles", y pretendía la anexión total de la isla por parte del estado griego. La respuesta turca fue inmediata. Más de 30.000 soldados turcos invadieron el norte de la isla, expulsando a la población grecochipriota hacia el sur, y llegando a poner sitio a Nicosia. Como consecuencia de esta invasión, miles de familias grecochipriotas tuvieron que migrar al sur de la isla, al tiempo que los turcochipriotas del sur migraron hacia el norte. Actualmente, fuerzas de Naciones Unidas (UNFICYP) mantienen un área de seguridad entre el norte turco y el sur griego, que atraviesa, no sólo la isla, sino también su capital, Nicosia.

Desde entonces se han sucedido diversos intentos por parte de la ONU para reunificar la isla, todos ellos sin éxito. Además, Turquía ha amenazado en repetidas ocasiones con anexionarse la RTNC en caso de que fracasen las negociaciones de paz. La última de ellas, esta semana.

Monumento turco al Coronel Karaoglanoglu
Cuando sea Presidente de Europa, me veré obligado a tomar cartas en el asunto. Y el asunto, como ya he expuesto, es complicado. Pero a pesar de todas las dificultades que plantea la reunificación de Chipre, ése debe de ser el objetivo a perseguir, dado que cualquier otra solución pasaría por el reconocimiento de una derrota política, diplomática y militar de Europa. Ante todo, lo que no se puede consentir es que el conflicto permanezca enquistado en el olvido. Para empezar, sustituiré progresivamente las tropas de la UNFICYP por tropas del Eurocuerpo, aunque sólo sea por una simple cuestión de orgullo (los problemas de Europa, los atiende Europa). Habría que estudiar sobre el terreno y muy detenidamente si 40 años después de la invasión merece la pena luchar por un Chipre multicultural y unido, o si ya es demasiado tarde. En cualquier caso, habrá que presionar a Turquía bloqueando todas las relaciones diplomáticas y comerciales UE-Turquía a todos los niveles, para forzarla a abandonar la isla, puesto que lo que ocurrió en 1974  fue una invasión militar en toda regla. Y una invasión ilegal.

Con la retirada de las tropas turcas, los turcochipriotas tendrán dos opciones. O bien se quedan en Chipre, cuyo gobierno deberá de garantizar el respeto a la minoría turca (uno de los pilares fundamentales de la UE), o si tan turcos son, se marchan a Turquía. En este punto creo conveniente recordar que la RTNC tiene ahora mismo poco más de 200.000 habitantes, de los cuales, varias decenas de miles son militares turcos. Desgraciadamente, creo que a estas alturas, los turcochipriotas y los grecochipriotas no quieren verse ni en pintura. Así que tal vez, sean muy pocos los turcochipriotas que decidieran quedarse. En cualquier caso, de lo que no cabe la menor duda es de que al gobierno turco le supondrá menos costes económicos el realojamiento en Turquía de 200.000 personas que mantener durante otros 40 años la ocupación militar del norte de Chipre.

Por otro lado, quedaría por resolver la cuestión de las bases militares de Acrotiri y Dherkelia, que aún mantiene el Reino Unido en la isla. Aquí surgen varias posibilidades, pero ninguna de ellas es el mantenimiento de la soberanía británica. ¿Qué sentido tiene que un estado europeo tenga bases militares en otro? Es como si las Fuerzas Armadas Extremeñas tuvieran bases militares en la isla de El Hierro. Así pues, propondría que Dherkelia, por estar en la frontera con la parte turcochipriota, pasase a ser una base militar del Eurocuerpo, al mando de un general grecochipriota; mientras que restituiría de forma completa la soberanía sobre Acrotiri al gobierno chipriota, al menos mientras dure la integración de todas las fuerzas armadas europeas en el Eurocuerpo. Y todo esto, sin perjuicio de los aproximadamente 7.500 ciudadanos británicos que actualmente viven en estas bases, claro. Si se quieren quedar en la isla, se podrán quedar, siendo libres de escoger la nacionalidad chipriota o la británica.

Bonus Track: ¿Cómo es posible que Turquía sea candidato oficial para la ampliación de la UE sin que se haya solucionado el conflicto de Chipre?